Crema de verdura

Noviembre ha entrado con viento y lluvioso, al menos por estas tierras y una buena crema de verdura siempre se agradece, en casa la comemos continuamente pero no me decidía a publicar la receta porque parece que es poquita cosa para un blog de cocina y en el fondo es algo que cada uno hacemos a nuestra manera, así que esta entrada yo se que tampoco le va a solucionar nada a nadie, pero por otro lado he pensado que Bienmesabe más que nada es mi recetario personal, independientemente de que en vez de en una libreta guardada en un cajón esté escrito en un espacio publico y abierto como es un blog de libre lectura, así que finalmente le he dado su protagonismo, que también se lo merece.

Con el paso de los años he ido modificando esta receta hasta encontrar la combinación perfecta para el paladar de casa, antes le ponía la verdura que tenía más a mano, pero poco a poco fui poniendo de aquí y quitando de allá y al final la crema de verdura en casa siempre es esta, con estos mismos ingredientes y en la misma cantidad. Porque así es como más nos gusta después de probar muchas combinaciones.

Normalmente la solemos tomar para cenar, aunque al medio día también la hago y la acompaño de algo ligero como algún pescado o carne a la plancha. Voy alternando esta crema con la de calabaza, así no nos cansamos de tomar siempre lo mismo.

Con las cantidades que os doy saldrán 4 raciones generosas.

Ingredientes

1/3 de coliflor
2 calabacines hermosos
4 zanahorias
1 cebolla
2 ramas de apio
Agua
Sal
Aceite de oliva

Meterse en faena

Ponemos en una olla algo más de un litro de agua y vamos limpiando la verdura, al calabacín le dejo algo de la piel, no sólo deja motitas verdes al triturarlo que hace mono sino que la piel contiene mucha fibra y es buena para nuestros intestinos.

Al apio le quito con ayuda del pelador las hebras más duras y troceo pequeño, raspamos las zanahorias y troceamos. Limpiamos también la cebolla y la coliflor.

Ponemos en la olla todo junto y añadimos un polvo de sal y un chorrete de aceite de oliva. Cocemos hasta que la verdura esté tierna.

A mi las cremas me gustan espesas asi que retiro algo del agua de cocción, y con ella hago cubitos de caldo, trituramos y le añadimos un hilo de aceite de oliva para emulsionar bien la crema. Una vez bien fina la llevamos otra vez a ebullición para que se eliminen las burbujas de aire que cojera al batirla.

Una receta para el día a día estupenda y muy, muy rica.

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