Al principio de hacerlos los hacía siempre con el clásico
yogurt de limón, pero poco a poco fui descubriendo que esta receta admite
muchos ingredientes y sabores, así que ahora los preparo de diversas maneras y
casi siempre parto de la base del bizcocho de yogurt casero de toda la vida.
No solemos comer mucha bollería, pero la poca que comemos
procuro hacerla yo siempre, la verdad es que he puesto en cuarentena muchos
productos industriales y la bollería es uno de ellos.
Este bizcocho es sano, es fácil de hacer, aguanta varios
días perfectamente en una lata o en una bolsa de plástico, no se mancha casi
nada al hacerlo y está buenísimo.
Ya sé que a estas alturas va a ser casi imposible encontrar
a alguien que no conozca la famosa receta del bizcocho de yogurt, pero por si
acaso alguien se está iniciando ahora en la cocina, yo la dejo, nunca se sabe
si le puede servir a alguien.
Ingredientes
4 Huevos
1 Yogurt tipo griego
3 medidas del yogurt de harina
2 medidas del yogurt de azúcar
½ medida del yogurt de aceite
1 sobre potenciador químico
1 c/s cacao puro
Ralladura de naranja
1 c/s leche
Meterse en faena
Precalentamos el horno a 180ºC, si tenéis aire, con aire, si
no, arriba y abajo.
Cascamos los huevos en un bol amplio y batimos, le añadimos
el yogurt griego y mezclamos bien.
Le ponemos el azúcar y el aceite y volvemos a mover.
Mezclamos el potenciador químico con la harina y tamizamos sobre nuestra mezcla.
Una vez todos los ingredientes estén bien integrados dividimos la mezcla en dos
partes iguales.
A una de las partes le rallaremos piel de una naranja, sin
nada de blanco que amargaría mucho.
A la otra mitad de la masa le pondremos la cucharada sopera
de cacao en polvo y una cucharada sopera de leche.
Cogemos un molde y lo engrasamos bien con aceite de oliva,
vertemos la mezcla de uno de los boles y luego la otra y con una cuchara la
movemos un poco para que se entremezclen.
Horno unos 30 minutos, dependerá de vuestro horno, no
abrirlo hasta pasados mínimo 20 minutos si no se nos puede bajar. Pasados 30
minutos pinchar el bizcocho con un palito de brocheta y si sale limpio es que
está hecho.
Sacadlo del horno y dejar enfriar a temperatura ambiente. Yo
lo he decorado con azúcar glas.
Mas facil imposible, me cojo un trocito para acompañar el café.
Mas facil imposible, me cojo un trocito para acompañar el café.
Este bizcocho te ha salido de muerte!!! rico, rico, besitos
ResponderEliminarTengo que intentar hacerlo porque si sabe tan bien como parece.... delicious
ResponderEliminarQué rico Chusa, lástima que no me puedas guardar un trozo, pero tomo nota y lo pruebo en casa. Un saludo.
ResponderEliminarHola chicas, os puedo decir que el bizcocho lo hornee el sábado y queda un trocito pequeño y sigue esponjoso. Es muy sano porque no lleva mantequillas ni nata, sólo aceite de oliva. ¡Besos!
ResponderEliminar¡¡ Que buena pinta tiene este bizcocho !! Es cierto que los bizcochos de yogurt para mi también suelen ser los más fáciles y resultones. Marmolado no lo he hecho nunca, quizás con esta receta me anime.
ResponderEliminarBesos.
que buena pinta tiene !!! se ve muy jugoso , tengo que probarlo!
ResponderEliminarbesitos
Delicioso! Me encanta y si encima aún esta esponjoso...mejor que mejor, lo probaré seguro! Besos
ResponderEliminarCuanto me alegra que os haya gustado la receta, ya me contareis si la haceis que tal os ha parecido. ¡Un beso guapas!
ResponderEliminarPor favor que medida es c/s y c/p ? Gracias y ojala me respondan pronto pues me muero de ganas de hacer esos ricos pasteles.
ResponderEliminarHola! c/s es cucharada sopera y c/p cucharada de postre :). Un cordial saludo.
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