Rollitos de pera y morcilla de burgos

Este mes, Isa Reina nos propuso para su Reto Cocina con Reina que elaboráramos una receta con morcilla de Burgos ya que la Comunidad Autónoma escogida este mes es Castilla y Leon y allí que me fui yo a comprar la morcilla (no a Burgos, al super del barrio), la guardé en el frigo y me dije, hay días. Y el domingo pensé...creo que se me ha olvidado algo...mmmmm...¿que será?...mmmm.....Y abriendo el frigorífico para coger algo me encuentro con una hermosa morcilla de Burgos desesperada porque le hiciera caso. ¡¡¡Ostras, el reto de Isa!!!.

Tuve que improvisar una receta con lo que tenía en aquel momento en casa y la verdad, el resultado no ha estado nada mal.Esta combinación de sabores no es nueva ni me he sacado un conejo de la chistera, no, pera y morcilla van cogidas de la mano desde hace tiempo, la pera ha ido poco a poco ganándole terreno a la manzana y en casa nos gusta más con pera que con manzana.

Estos rollitos son muy agradables de comer, yo les puse mayor proporción de fruta que de morcilla, me apetecía hacer un aperitivo más ligero pero podéis hacerlo al revés y que le destaque más el sabor de la morcilla que el de pera. Lo bueno, son facilísimos de hacer.

Si deseáis ver el resto de propuestas de las compañeras, clikead en la foto del reto.

Ingredientes para 2 rollos

8 Láminas de pasta filo
1/2 morcilla de burgos (se puede poner más)
1 pera conferencia grande madura pero firme
Piñones
Canela en polvo
Mantequilla

Meterse en faena

Pelamos la pera, quitamos las semillas y las partimos a daditos pequeños, la ponemos en un bol. Quitamos también la piel a la morcilla y troceamos a daditos también. Añadimos un puñadito de piñones y un poco de canela en polvo, movemos y reservamos.

Disolvemos una nuez de mantequilla en el microondas. Sacamos la pasta filo de su envase, el problema de esta pasta es que hay que trabajar rápido con ella porque si no se seca en seguida y se vuelve quebradiza.

Cogemos 4 hojas y a la de arriba la untamos bien de mantequilla derretida ayudándonos con un pincel de cocina, colocamos la mitad del relleno un extremo y vamos enrollando el paquete. Enrollamos las 4 láminas a la vez, no de una en una, si no se nos romperían. Cerramos humedeciendo los extremos de la pasta con un poco de mantequilla y sellando.

Formamos así los dos paquetes y pincelamos muy bien por fuera con mantequilla derretida (se puede hacer con aceite de oliva si lo deseáis).

Horno precalentado a 200ºC, ponemos los rollito en un papel vegetal y horneamos hasta que estén bien dorados y crujientes (unos 15 minutos).

Y ya están listos, se pueden comer fríos pero calientes están más ricos.

Espero que os guste esta propuesta ultra rápida.