Boquerones en gabardina

Siempre me ha gustado mucho el pescadito frito, lo comemos habitualmente en casa, porque  mi costillo es la forma en que mejor se come el pescado y la verdad es que es fácil encontrar en la pescadería alguna especie para hacer fritura, bacaladilla, pescadilla, salmonetes, calamares, chipirones, boqueron, lenguaditos...Me encantan todos aunque la verdad, a un buen boquerón soy incapaz de resisitirme.

Cuando hago pescadito frito normalmente lo preparo a la andaluza, o sea, rebozado sólo en harina, pero estos boquerones que compré eran más bien chiquititos y tenían un tamaño ideal para hacerlos en gabardina. La gabardina es una forma muy habitual de preparar frituras, todos conocemos los archiconocidos calamares a la romana y en Murcia los caballitos (gambas en gabardina) son una institución en muchos bares.

Estos boquerones se pueden tomar como tapita o aperitivo aunque yo los hice como plato principal acompañados de una buena ensalada, son un poco entretenidos ya que hay que abrirlos y quitarles la espina pero están deliciosos y son como las pipas, empiezas y no paras. Con la gabardina aumentan mucho, con medio kilo que hice me sobraron un montón para la cena, se pueden tomar fríos pero pierden el crujiente de la masa, aunque están también buenos.

Como veis en las fotos también freí unos pimientos de padrón, me gustan mucho los pimientos con el pescadito frito. Si no habéis comido así los boquerones os los recomiendo porque están buenisimos, no tienen espinas y es una forma fantástica para que los peques coman pescado.

Ingredientes para 2-3 raciones

1/2 Kg de boquerón
250 gramos de harina para preparar rebozados
Sal
Aceite de oliva
Agua
1 ramita de perejil
2 dientes de ajo
Cúrcuma

Meterse en faena

Comenzamos limpiando los boquerones, le quitamos la cabeza, con ayuda del dedo pulgar abrimos la panza y retiramos la tripa y sacamos la espina central dejándole la cola. Lavamos bien y metemos en un bol con agua fría para que se desangren bien, luego ponemos en una escurridera para que suelten todo el agua.

Preparamos la gabardina, yo usé una harina especial para preparar rebozados (existen muchas marcas en mercado que están muy bien porque no necesitamos huevo y ahora con el calor es una ventaja). Preparamos la masa siguiendo las instrucciones del fabricante, si no tenéis esa harina se puede hacer con harina normal y cerveza, o harina, huevo, agua y levadura tipo royal. Añadí a la gabardina la sal y un poco de cúrcuma para que le diera un color mas amarillito (no uso colorante alimentario, pero se puede usar), cuando tengamos la gacheta lista, sin grumos y con la suficiente consistencia para que recubra por completo el boquerón, le añadimos los ajos y el perejil muy, muy picadito, movemos y ya la tenemos lista.

Ponemos una sartén con abundante aceite de oliva a calentar y cuando esté caliente pero no humeé (en la vitroceramica yo lo tenía al 6+ de un máximo de 9+) vamos pasando los pescados uno a uno por la gacheta y friendo.

Los freímos por tandas dejando el aceite calentar bien entre tanda y tanda para que no esté flojo. Sacamos a un papel de cocina para que absorba el exceso de aceite y ya podemos servir.

Buenisimos, son un vicio y os recuerdo que tengo página en Facebook y que si os apetece conocerla estáis más que invitados.