Pimientos rellenos de tortilla de patatas

Con la llegada del buen tiempo apetece cada vez más salir a las terrazas, al campo o a la playa y todos sabemos que en esas salidas una de las cosas más importantes, además de la buena compañía que eso ya se presupone, es llevar una buena "capaza" con cosas ricas de comer. Hoy os traigo un aperitivo estupendo para esos momentos, no estoy descubriendo nada nuevo, esta receta está extendida en multitud de blogs de cocina pero tenía ganas de documentarla porque es muy buena, gusta a casi todos y es muy económica, cosa que siempre es importante.

No recuerdo donde vi por primera vez estos pimientos, lo que si recuerdo es que en ese preciso instante me apetecieron mucho y desde aquel entonces ya los he hecho en varias ocasiones porque salen muy buenos. Siendo totalmente sincera os reconozco que estos pimientos los hago cuando voy a hacer una tortilla de patatas, esa es la excusa para prepararlos, nunca he hecho todo el proceso sólo para rellenar los pimientos.

Se pueden tomar fríos o calientes y por supuesto, se pueden tener hechos con antelación y para llevar en una tartera si salimos de excursión son ideales. Normalmente se sirven con salsa de tomate casera o con tomate frito, el contraste es muy bueno, pero también podéis acompañarlos con un poco de mayonesa, un alioli suave o tomarlos sin salsa.

Ingredientes para 4 pimientos

2 patatas grandes
4 huevos
4 Pimientos italianos
Aceite de oliva
Sal
Harina de trigo
Salsa de tomate casera (receta AQUÍ)

Meterse en faena

Vamos a comenzar pelando y partiendo las patatas como para hacer tortilla, calentamos un chorro generoso de aceite de oliva en una sartén antiadherente y añadimos las patatas, ponemos sal, bajamos el fuego y tapamos las patatas para que vayan haciéndose medio fritas medio cocidas.

De vez en cuando vamos moviendo las patatas y con el canto de la cuchara de madera las vamos rompiendo para hacerlas trocitos pequeños, si no sería imposible rellenar los pimientos.

Una vez las patatas estén fritas, probamos y rectificamos de sal si fuera preciso. En un bol cascamos los huevos y batimos, añadimos las patatas escurridas del aceite y mezclamos. Limpiamos los pimientos quitándoles la parte del tallo y las briznas, lavamos y secamos. hay que procurar comprar pimientos anchos, rectos, de carne prieta y firme.

Rellenamos los pimientos con la mezcla de patatas y huevo, esta es la parte que a mi se me da peor, podéis ayudaros de una cuchara, de una manga pastelera, de un embudo...Como más maña os deis, no es difícil, sólo un poco pesado. Cuando tengamos los pimientos rellenos sellamos la boca con un poco de harina para evitar que se nos salga el relleno. Calentamos abundante aceite en una sartén y freímos los pimientos a fuego medio hasta que veamos que la piel comienza a estar hinchadita y se vean tiernos. Sacamos a un plato sobre papel absorbente y dejamos atemperar un poco, a mi me gusta retirarles la piel que sale fácilmente ya que quedan mejor y son más agradables de comer. Cortamos a rodajas y servimos sobre una cama de salsa de tomate, deliciosos.

Espero que os haya gustado esta receta tan sencilla y humilde pero tan buena y os recuerdo que si os apetece podéis seguirme en Facebook.