Champiñones en salsa

Vamos a acabar la semana con una receta vegana, en casa comemos mucha verdura y siempre ando buscando distintas maneras de prepararla, porque al vapor tal cual, aunque está rica es verdad que aburre un poco.

Nos gustan mucho los champiñones, hace ya tiempo publiqué una receta de champiñones rellenos y hoy os traigo una receta de champiñones en salsa muy rica, facilita como es mi estilo y estupenda para tomar tal cual o como guarnición de otro plato.

Yo he usado un poco de brandy pero se puede sustituir por vino blanco, también se puede suprimir el toque picante si no os agrada y si tampoco sois muy amantes de la verdura al dente se puede trocear o laminar el champiñón, yo lo hice entero porque era pequeño y nos gusta la verdura no muy cocida.

Ingredientes para 2 personas

400 gramos champiñon fresco
1 cebolla tierna pequeña
2 dientes de ajo
1 c/p tomate concentrado
1 guindilla cayena
Sal
Perejil picado
1 chorrete de brandy
Caldo de verdura
Aceite de oliva
1 c/p harina

*c/p=cucharada pequeña

Meterse en faena

Pelamos y picamos los dientes de ajo, en una tartera baja con un fondo de aceite de oliva los ponemos a rehogar y cuando comiencen a coger color le añadimos la cebolla pelada y muy picadita, le incorporamos también la cayena y dejamos que vayan cocinando lentamente. Añadimos un polvito de sal para ayudar a sudar.

Limpiamos el pie de los champiñones quitándole la parte terrosa y lavamos muy bien bajo el grifo de agua fría, no hay que dejarlos nunca a remojo ya que al ser muy porosos absorberían mucha agua y no nos conviene.

Cuando la cebolla esté tierna incorporamos el concentrado de tomate (podéis sustituirlo por un poco de salsa de tomate), movemos bien y añadimos el harina, removemos muy bien para que no se le quede sabor de harina cruda e incorporamos los champiñones. Salteamos y regamos con el brandy, si sois atrevidos probad a flambearlo (esto se hace prendiéndole fuego al brandy con un mechero o una cerilla y dejarlo hasta que se extinga por si mismo) si no os atrevéis simplemente dejar que reduzca. Yo si lo flambeé.

Después mojamos con el caldo de verdura, yo usé caldo de brick, podéis usar casero o incluso una pastilla de caldo de verdura concentrada, aunque yo no soy muy amante de estas pastillas, todo hay que decirlo.

Tapamos y dejamos cocinar suavemente hasta que el champiñón esté tierno, mover de vez en cuando porque al llevar harina tiende a agarrar al fondo de la cazuela. Espolvorear con perejil muy picado justo al final.

Muy fáciles y deliciosos. Aprovecho para invitaros a que deis un me gusta a mi página de Facebook.