Bizcocho de zanahoria y coco

Este fin de semana he estado poniendo un poco de orden en todas las recetas que tengo pendientes de publicar y revisando un poco el contenido que ya tengo publicado, a pesar de que sólo publico 2 ó 3 entradas a la semana yo misma olvido qué cosas he publicado y de vez en cuando me gusta darle un repaso, cual ha sido mi sorpresa cuando he visto que en el 2014 no he publicado una sola receta de bizcocho.

Sabéis que siempre ando a la caza de recetas más saludables y cuando encontré esta receta de bizcocho de zanahoria y coco en la web de Eva Arguiñano fue instantáneo que la pusiera en práctica. Es una receta muy fácil de hacer, no contiene mucha materia grasa, apenas lleva mantequilla y aunque las carrot cake están muy de moda yo buscaba una receta más apta para el desayuno y este bizcocho ha sido todo un descubrimiento. Con deciros que lo horneé el sábado por la mañana y no llegó al desayuno del lunes....

 Puse a mi chico a prueba para ver si era capaz de descubrir el ingrediente inesperado en el bizcocho y con el coco dio a la primera (poco paladar tendría que tener para no notarlo) pero la zanahoria le pasó totalmente desapercibida y eso es una ventaja estupenda para todas las madres y padres preocupados en que sus hijos pequeños coman verdura, que es algo que por regla general les cuesta tomar, muchas veces por pura cabezonería, añadiría yo.

Este bizcocho no ha subido mucho, primero porque sólo usé la mitad de la levadura que indicaba la receta original y segundo porque quería estrenar unas plantillas decorativas de Lékué que me regalaron por mi cumpleaños y necesitaba usar un molde más grande. Es un bizcocho muy húmedo, es muy ligero de tomar y contiene mucha fibra, ya que tanto el coco como la zanahoria son ricos en ella, con lo cual este bizcocho es ideal para todos aquellos que practican deporte ya que la fibra es indispensable si se hace ejercicio.

En este caso no tengo fotografías del paso a paso, andaba liada y se me olvidó hacerlas, espero que no os importe.

 Ingredientes

2 ó 3 zanahorias (yo usé 2 medianas)
3 Huevos
50 G coco rallado (mas el de decoración)
75 G Azúcar moreno
100 G harina
50 G mantequilla
1/2 sobre levadura royal

Meterse en faena

Precalentamos el horno a 180ºC, calor arriba y abajo.

La receta original de este bizcocho es con azúcar blanquilla pero yo siempre que la receta me lo permite procuro usar azúcar moreno ya que está menos procesado y es más sano. Podéis usar azúcar blanquilla si lo preferís, no va a variar el resultado de la receta.

Cascamos los huevos en un bol y le añadimos el azúcar, batimos bien hasta que el azúcar esté totalmente disuelta y la mezcla doble volumen, yo lo hice a mano pero podéis ayudaros de varillas eléctricas si las tenéis.

Añadimos la mantequilla a punto de pomada (hay que dejarla fuera del frigorífico un buen rato para que quede como una crema) y el coco rallado, mezclamos bien.

Lavamos las zanahorias, las rallamos y las añadimos a la mezcla.

Por último mezclamos la levadura con la harina y añadimos al bol moviendo con cuidado con movimientos envolventes.

Encamisamos el molde, esto es untar las paredes y el fondo con mantequilla y después añadir una pequeña cantidad de harina, sacudir el molde bien para que la harina se distribuya bien por todo el interior y luego volcamos para eliminar el exceso. Si usáis un molde de silicona no necesitáis hacer el encamisado.

Volcamos la masa en el molde y alisamos la superficie, horneamos hasta que esté bien dorado. Para comprobar si está hecho introducimos un palito de brocheta dentro y si sale limpio es que está cuajado. Dejamos enfriar antes de desmoldar y decoramos como más nos guste, yo usé coco rallado pero se le puede poner también azúcar glasé o hilos de chocolate.

Como veis es una receta muy fácil y está buenísimo, repetiremos seguro y os animo a probarlo y de paso os invito a que conozcáis mi página de Facebook.